LEGALIDAD PARA TODOS LOS SOLDADOS

Estimados Amigos:

A veces es conveniente el silencio cuando lo que decimos es políticamente incorrecto.

Pero no me importa el riesgo de decir lo "políticamente incorrecto" si debo callar verdades que intranquilizan mi consciencia y me convierten en cobarde.

El juicio a los militares forma parte de una injusticia y la falta de legalidad que los argentinos permitimos en silencio convalida una situación inadmisible en nuestro país.

No se trata de cubrir y justificar las violaciones cometidas y que fueron delitos, cometidos por algunos y no por todos los miembros de las Fuerzas Armadas y de Seguridad.

Pero casi todos los juzgados, son inocentes con causas armadas y/o lo están siendo sin cumplirse las leyes o vulnerándola abiertamente a causa del odio y el resentimiento.

Fue una guerra y existen demasiados ejemplos de las barbaridades que cometieron los "jóvenes idealistas" en nombre de una revolución que hasta el día de hoy no alcanzo a entender, cuando veo sus consecuencias en Cuba y en sus supuestos aliados que oprimen a sus pueblos y administran pobreza e ignorancia.

Un gobierno constitucional ordenó aniquilar el flagelo de la subversión.

Nuestra sociedad, los partidos políticos, la clase dirigente y la sociedad en su conjunto convalidaron la lucha contra la subversión y avaló por acción u omisión el golpe de estado.

Hoy le damos la espalda y los traicionamos.

Como es habitual y con la típica hipocresía de los "demócratas declamativos" de siempre se podrá censurar mis palabras, pero no se puede tapar el sol con un helado y yo no sería capaz de mirar y proteger a mis hijos si no reacciono frente a tanta mentira y frente a una injusticia inadmisible.

Como reacciono frente a otras injusticias que agobian a nuestra sociedad.

Yo fui uno de los argentinos que esperó con esperanza la vuelta de Perón a la Argentina y creyó que con su prestigio podía normalizar la situación política de la Argentina.

Yo estuve en la Plaza de Mayo el día que Perón expulsó de la plaza a los Montoneros y a los extremistas que ya no le eran funcionales y que se habían convertido en una amenaza permanente para la existencia de las instituciones de la democracia.

Milité y trabajé por un conjunto de principios e ideas que creí eran las adecuadas, pero m equivoque.

Por eso, los pretendidos "progresistas" que vulneran la constitución, las leyes, violan los principios consagrados como la irretroactividad de la aplicación de las leyes y de cosa juzgada, están cometiendo un delito contra el sistema democrático y pierden toda razón y justificación frente a los militares que están siendo juzgados ilegalmente.

Se trata de cumplir con la ley.

Me guste o no.

Sean pro militares o anti militares, sean jóvenes idealistas o no, se deben cumplir las leyes.

Sueño con una Argentina unida con Paz, legalidad para todos y desarrollada.

Tengo la esperanza y el "Sueño" que algún día podamos rendirle el homenaje que se merecen los hombres y mujeres que lucharon contra los enemigos de nuestra sociedad (las subversión, los piratas invasores y sus socios, los traidores que concedieron superpoderes y leyes para saquear la Argentina, los corruptos y los que lucran o se benefician con la pobreza, la inmensa asociación ilícita que desde las instituciones permitieron toda clase de ilegalidades, los MCS infiltrados por un progresismo declamativo, etc.).

Ese homenaje debe nacer en el corazón y debe servir para unir a todos los argentinos, debemos lograr la paz, respetar el derecho de cada persona a vivir según sus convicciones, con legalidad y con desarrollo.

Por eso deseo expresar título personal, que no estoy de acuerdo y rechazo el juicio a los militares que se está llevando con revancha, odio y sin legalidad.

Le rindo mi humilde homenaje a todos los soldados que están siendo injustamente maltratados y me preocupa enormemente las consecuencias cuando nuestro pueblo traiciona a sus soldados porque creo debe revisar que clase de valores justifican su existencia.

Soldados injustamente tratados, estoy con Uds.

Un fuerte abrazo para Uds. y vuestras familias.

Un fuerte abrazo.

Ing. Luis Clement